Colombia:Acuerdo de Paz Grandes Temas de Acuerdo
Logo Enrique Neira

 

 

     

  Los siguientes acuerdos logrados fueron los inicialmente asumidos y trabajados con mucha paciencia y civilidad durante casi 4 años, como cauces para el diálogo, la discusión, la consulta con asesores y el compromiso común para ejecutarlos.Tomados en conjunto y no aisladamente, cual si fueran parches aislados, como ocurre en una buena obra artística de pintura, tienen más sentido y coherencia que resulta positiva y aun laudatoria.

1. ‘Política de desarrollo agrario integral’

                Era uno de los problemas-clave agitados por la insurgencia desde años atrás. Y en el que se logró acuerdo que sorprendió a muchos. El gobierno Santos tenía un trabajo muy avanzado en la materia con el proyecto de Ley de Tierras y Desarrollo Rural que el ministro Juan Camilo Restrepo venía  trabajando desde hace 20 meses atrás y en el que han participado prácticamente todos los que tienen que ver con tierras en este país, incluidos sectores afectos a las FARC (Programa Agrario de las Farc 1964). Alguien que estuvo en los diálogos del Caguán le dijo a Semana: “En ese entonces sobre lo agrario el gobierno no tenía nada y mucho menos algo tan elaborado como lo que ha venido haciendo este gobierno en estos años”.

 

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 2. ‘Participación política’
            No era fácil espantar el fantasma del exterminio sufrido por la Unión Patriótica, partido popular que  nació tras acuerdos anteriores de La Uribe en 1984, que tuvo éxito electoral  en su primera incursión electoral en 1986, y que fue liquidado por la ‘mano negra’  del narcotráfico -siendo asesinados sus dos candidatos presidenciales, Jaime Pardo Leal y Bernardo Jaramillo-. Pero los tiempos han cambiado con la liquidación del cartel de Pablo Escobar en Medellín y entrega de grupos paramilitares al gobierno de Uribe. El actual Acuerdo una vez firmado garantiza todo tipo de derechos y garantías para los nuevos movimientos que surjan pudiendo ellos aspirar a cargos públicos y ejercer la oposición política. Está abonado el terreno para pensar que han quedado atrás épocas del bipartidismo excluyente y de intolerancia política. Por otra parte, si las FARC dejan las armas, no habrá combinación de formas de lucha. Lo que está por verse es qué entienden las Farc por participación en política y si aspiran a algún tipo de esquemas de circunscripción especial o alguna novedad electoral más allá de las previstas hasta ahora.

3. ‘Solución al problema de las drogas ilícitas’
            No era posible una mesa de diálogo con las FARC sin tocar este tema. Que sigue siendo candente y batallón. Pero el país no puede creer que este problema se puede resolver por completo por parte de Colombia y como bien le parezca o convenga a ella. Es un problema mundial en el que convergen gigantescos intereses de muchos países y métodos opuestos de atacarlo en sus raíces y consecuencias, que deberá ser acometido por la ONU y organismos internacionales en todas sus dimensiones.
            Pero advertimos que para el manejo inmediato de este problema hay coincidencias entre las dos partes. Tanto las FARC en un comunicado de 2000, como el presidente Santos en algunas declaraciones a medios internacionales, se han mostrado proclives a la legalización de las drogas. Y dicha tendencia se va reforzando con el ejemplo de varios Estados norteamericanos y de países como Uruguay en nuestro continente. Y con más pertinencia tratándose de la famosa “cannabis” o marihuana y sus propiedades medicinales que va abriéndose paso en muchos países, y cuya producción y comercialización ya ha sido objeto de nueva ley colombiana (mayo 2016) siguiendo los pasos de Chile. De modo que ya se han creado dos grupos económicos fuertes para el cultivo y comercialización al exterior con fines medicinales: uno colombo-canadiense llamado “Pharma Cielo” y otro de capital paisa “Sannabis”.
4. ‘Víctimas y verdad’
            Estaba previsto que uno de los resultados del diálogo fuera la creación de una Comisión de la Verdad. “Resarcir a las víctimas está en el centro del acuerdo Gobierno Nacional–FARC EP”. Es otro de los reclamos claves del país y se refiere a las víctimas tanto de la guerrilla como de los paramilitares. Respecto de este punto también se tiene ya terreno abonado con la Ley de Víctimas y de Restitución de Tierras. Y lasFARC así lo han reconocido. En un video en enero de 2011, el entonces comandante de las FARC Alfonso Cano, se refirió a esa ley como “un buen comienzo para la paz”. Y el gobierno Santos ha comenzado ya a titular cientos de hectáreas a familias campesinas despojadas a la fuerza de ellas. Y se ha comprometido a acelerar los fallos de restitución y entrega de tierras, incluidos baldíos de la Nación.
           
5. ‘Fin del conflicto’
            Por primera vez las FARC aceptan incluir la “dejación de las armas” y su “reincorporación a la vida civil”.  El Marco Legal para la Paz aprobado por el Congreso en junio de 1912 era ya un paso notable porque preparaba la aplicación de la Constitución para esta difícil negociación con la guerrilla.  En particular en lo referente a las deudas con la justicia. Deja claro que los guerrilleros podrán ser beneficiados con el principio de oportunidad (que no los investiguen) o con suspensión de la pena. Sin embargo, no podrá haber amnistías o indultos porque, entre otras cosas, el Tratado internacional de Roma no lo permite.
            Fue un punto difícil y complicado por sus muchas aristas que se fue obviando con la llamada “Justicia transicional” con minuciosidades que todavía ocuparon las últimas sesiones (con asesoría calificada de juristas) antes de firmar el Pre Acuerdo del 23 de septiembre.  Y queda pendiente el trámite de la Ley Estatutaria en el Congreso, que definirá a cuáles guerrilleros se judicializa y cómo (los beneficios no se pueden dar a quienes hayan cometido delitos de lesa humanidad de manera sistemática), y quiénes podrán participar en política.  Se hará uso de la famosa epikeia clásica de los griegos en la aplicación de las leyes. Una ventaja que tienen las FARC es que en su caso se podrá ya incluso hablar de "delito político", algo que no estaba contemplado como punible en el anterior Código penal colombiano. Pero queda por definir si ciertos delitos (por ejemplo relacionados indirectamente con narcotráfico y secuestros) puedan ser en este caso considerados legalmente como “anexos” del “delito político” y por lo mismo penalizados.
Solo ganadores, no perdedores .  Con gran acierto y sentido de las proporciones, el autorizado comentarista Miguel Angel Bastenier de El País tituló su columna "Victoria sin derrota" (16 de junio 2012), refiriéndose  al triunfo de Santos para nuevo período de 4 años en segunda vuelta de  las elecciones presidenciales en Colombia. Pues  la convirtió en una especie de Plebiscito por la Paz que ganó sin lugar a dudas.  Paz tan sentidamente buscada y anhelada por todo el pueblo colombiano (sin distingos de colores políticos, ni de clases sociales, ni de fes religiosas, ni de regiones) como la mejor inversión que puede hacer el país y el camino correcto para un futuro confiable con un desarrollo todavía más acelerado y mayor justicia social. "Todos ganamos! " fue el resultado para los colombianos.
            Observamos que no se puede considerar un 'derrotado' al ex presidente Uribe cuya efectiva Seguridad Democrática por 8 años (2002-2010) permitió dejar al país galvanizado contra todo intento de cambio de poder o 'revolución' por la vía de fuerza de las armas. Al final de su mandato quedó una guerrilla debilitada, con más sentido de la realidad y capaz de aceptar un compromiso por la paz, llevadero, duradero, confiable y sin vuelta atrás. Sobre dichas bases la administración Santos -con inteligencia, pragmatismo y diplomacia- llevó hasta el final el Acuerdo de Paz que construirá el nuevo país. Hay que abonarle al ex presidente Uribe su actitud crítica (que hasta fue llamada ´cerril´, mal interpretada por los medios y algunos sectores políticos) que no iba en contra de Santos ni de la Paz, sino con la intención de prevenir concesiones y ventajismos para la guerrilla con ya medio siglo de experiencia en mentir y engañar. Uribe acepta finalizar el largo conflicto con la firma del Acuerdo de Paz; pero sigue predicando más de lo necesario (con detrimento para su bien lograda fama) que estará vigilante con su apretado grupo de parlamentarios (21 senadores) para que las Leyes que reglamentarán la aplicación de puntos pendientes del Acuerdo y las Facultades especiales que se otorgarán al presidente, salgan equilibradas y justas para beneficio de todos. Con profundo sentido de verdadera Democracia, el Uribismo tanto como el Santismo creen en los famosos "checks and balances"(controles y contrapesos) de la democracia que aplican los norteamericanos, quienes desde el Congreso equilibran el peso a veces exagerado del Ejecutivo y en ocasiones del Judicial, y previenen posibles graves errores que se les ocurra hacer.

TEMAS:

  1. Historial Político
  2. ¿Cuál paz?
  3. Farc
  4. Causas del conflicto armado
  5. Decantado proceso de paz
  6. Avatares del proceso
  7. Los grandes temas acordados
  8. El acuerdo final
  9. Post conflicto
  10. Conclusión

 


ENF  15-07-2016